lunes, 16 de noviembre de 2015

Reserva Punta Leona, Costa Rica

Exótica, Tropical y Paradisiaca. Tres adjetivos que se quedan cortos cuando se habla de esta zona de vida natural ubicada en la costa central de Puntarenas en Costa Rica; hogar de las aves tropicales más famosas y coloridas del mundo, las guacamayas escarlatas. Desde cualquier punto de esta reserva, cortejan el cielo y vuelan elegantes y libres de dos en dos (o en grupo), saliendo desde los manglares de Guacalillo, (donde duermen cada día) hasta el Parque Nacional Carara,  lugar al que llegan en busca de su alimento diario.  Desde los  Altos de Leona Mar las observamos volar diariamente. En su ir y venir hacen un perfecto contraste con el límpido azul del cielo, resaltando el rojo vivo de su plumaje, mezcla perfecta con el azul audaz y el brillante color amarillo de sus alas, parecieran un destello multicolor al desplazarse en el firmamento.   Espectaculares vistas de Playa Blanca y del imponente Océano Pacífico sumado a dramáticos atardeceres de intensas tonalidades naranja, hacen de cada viaje una estadía plena  colmada de momentos perfectos.  Es imposible dejar de mencionar las imponentes montañas que nos resguardan y que adornan con su impresionante altura la Costa Pacífica, ese verdor tan profundo que sólo posee mi tierra hermosa, permea los tenues rayos del sol poniente.
De exuberante naturaleza propia del Bosque Tropical Húmedo de Costa Rica, esta zona del país posee hermosas playas de arena blanca y mar esmeralda,  en donde también coexisten inteligentes monos cariblancos, monos araña, pizotes, iguanas, tucanes, entre muchos otros. Todos ellos son vitales para la conversación de nuestras selvas tropicales debido a la vida transicional que aquí se propicia entre las selvas del sur y noroeste. Una zona de bosque primario y secundario, refugio de incalculable vida silvestre y marina la hacen poseedora de los más ricos ecositemas del planeta donde muchas especies se reproducen y se alimentan.
Esta es la tierra que me vio nacer y crecer, que con orgullo represento y que me emociona cada vez que me encuentro frente a una de sus innumerables gemas.

  










domingo, 15 de noviembre de 2015

5,000 visitas!

En el 8ctavo Rooftop no solo se aprecia el Gran Area Metropolitana de San José, Costa Rica, sino también las estribaciones de la Cordillera Volcánica Central, el imponente Volcán Irazú y las impresionantes puestas de sol que emergen  del Valle de Santa Ana. Desde aquí, celebro las 5,000 visitas a mi blog De Placeres y más...Un sitio en donde no solamente recopilo y comparto datos sobre lugares interesantes que he visitado, sino que ha sido el canal que me ha permitido ir más allá de la narrativa en búsqueda de la quintaesencia: la inspiración.
Muchas gracias a todos los que han entrado una y otra vez al blog para apoyarme y leer un poquito de esos lugares tan maravillosos que he visitado y que se mantienen aún frescos en mi memoria. Espero continuar soltando las cuerdas de mi navío para navegar lejos de puerto seguro y atrapar vientos favorables hacia una vida más ligera...




miércoles, 4 de noviembre de 2015

Petit Champlain, Québec

En el corazón del Québec antiguo, cerca de la muy auténtica "Escalier Casse-Cou" y al pie de la Côte de la Montagne  (61, Rue due Petit-Champlain), sobresale  una angosta calle de adoquines llamada Petit-Champlain (en honor al fundador de Québec, Samuel de Champlain) , misma que, colmada de coloridas boutiques y muy acogedores bistros, se ha convertido en una de las zonas más populares de esta ciudad sobre todo porque posee una impresionante arquitectura histórica; esta calle es además casa de museos, galerías y de tiendas de artesanías.  Desde este punto se puede tomar el funicular que conduce a la parte alta de la ciudad donde se encuentra la Terraza Dufferin y desde donde se levanta impresionante el Castillo de Frontenac - emblema de la ciudad -.
Este singular pasaje posee su propia personalidad, de sus tiendas cuelgan flores multicolores,  ventanas de madera talladas con corazones y detalles minúsculos, puertas de rojo brillante y bombillitas diminutas que al encenderse dan la impresión de haber salido de un cuento de hadas.  Banderas azules con la flor de lis (símbolo de la identidad francesa de esta provincia) ondulan orgullosas en muchos de los balcones de esta vía; detenerse y observar cada detalle que irrumpe a nuestro paso, es todo un placer.  Sorprendida veo  a lo lejos algunos quebequences vestidos a la usanza medieval. Mi mente vuela y tengo la sensación de encontrarme en alguna callecita de la Edad Media con civiles haciendo gala de su indumentaria, sobrevestas, plumas, capas y peyotes.
 El mural de la Calle Petit Champlain (estilo Trompe L'Oeil) adorna los exteriores de esta zona conmemorando los orígenes del distrito e ilustrando no sólo los bombardeos y eventos ocurridos aquí, sino que también cuenta a manera de relato gráfico, la vida de aquellos que construyeron con su trabajo, los inicios del distrito. Un hermoso fresco de incalculable valor y belleza, herencia para el mundo que ama el arte y la historia.
Esta es definitivamente una ciudad que mantiene su  pasado medieval intacto, la ciudad amurallada con impresionantes fortificaciones que aún prevalecen desafiantes y su principal Calle Du Champlain que con sus particulares frescos, artistas por doquier (sede de las artes circenses del Circo del Sol), hacen de éste un destino y un viaje sin precedentes.
 "La pintura es poesía muda, la poesía pintura ciega". Leonardo Da Vinci