Resguardado por el mar Mediterráneo y engarzado al final de La Rambla y de la Plaza Portal Paz se encuentra el Puerto de Barcelona. Un lugar hermosamente diseñado y engalanado por el Puente peatonal Maremagnus, el cual hace honor a la historia que se refleja en cada monumento, edificio y plaza (aquí se encuentra también el Monumento a Cristóbal Colón).
Nos bajamos del bus turístico de Barcelona una tarde calurosa de verano y recorrimos este peculiar puerto durante unas cuantas horas. El imponente barco de Colón, ubicado estratégicamente al lado del Maremagnus, me hizo retroceder en el tiempo e imaginar al explorador Colón a punto de zarpar al encuentro del "nuevo mundo". La realidad me convoca y en su lugar diviso barcos y cruceros turísticos a la espera de navegar al encuentro de algún lugar interesante. Huele a sal, mar, y brisa. Este es el momento para tomarse la foto ideal, el recuerdo que nos acompañará por siempre; qué mejor lugar que el Maremagnus?. Espectacular vista!! Sin mucho tiempo que perder (solamente estuvimos 3 días en Barcelona) abordamos nuevamente el autobús turístico en busca de alguna de las tantas playas que se encuentran a lo largo del Puerto. Por fin decidimos bajarnos en la Playa de Bogatell. Un hermoso lugar lleno de pequeños restaurantes, bares y tiendas de souvenirs; repleto de turistas, quienes retrayéndose del ruido y del estrés, aprovechan de una hermosa tarde de verano para sentarse en la arena, tomar sol y relajarse junto al Mar Mediterráneo.
"A tus atardeceres rojos se acostumbraron mis ojos como el recodo al camino....Cerca del mar porque yo naci en el Mediterraneo..." Joan Manuel Serrat
